No le gusta seguir el protocolo y el Papa Francisco lo ha demostrado de nuevo cuando ha mandado detener su vehículo descapotable para invitar a subir a bordo a este chico. Un adolescente que llevaba la camiseta de la selección argentina con el nombre de Messi a la espalda. El pontífice se ha mostrado muy cariñoso con él e incluso le ha dejado probar su asiento.