Las autoridades de la ciudad ucraniana de Odesa han decretado un toque de queda que impedirá a la población salir de sus casas desde el sábado a las 21.00 horas hasta el lunes por la mañana, 6.00, de tal forma que sólo podrán moverse por la zona quienes tengan permisos especiales.

El jefe militar regional, Maxim Marchenko, ha vinculado esta medida al ataque perpetrado este viernes sobre una estación de tren en Kramatorsk, en el este de Ucrania, que se ha saldado con al menos medio centenar de muertos. Ha advertido en Telegram de que hay también riesgo de un ataque con misiles en Odesa.

Las autoridades locales han denunciado ya varios ataques en estas últimas horas. El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, ha asegurado que las fuerzas de Rusia han destruido un centro de entrenamiento utilizado por "mercenarios extranjeros" en los alrededores de Odesa.