"Un guardia de seguridad disparó contra los médicos en un hospital de la zona de Darulaman en el oeste de la capital. Tres de ellos murieron y otros dos resultaron heridos", dijo el portavoz policial Hashmat Stanikzai. No ha trascendido la nacionalidad de los fallecidos.

La fuente explicó que el atacante resultó herido en un tiroteo con las fuerzas de seguridad y fue capturado. Sin embargo, un testigo ha explicado que el atacante trató de suicidarse sin éxito tras disparar a los doctores.

Los ataques contra extranjeros en la capital afgana, que hasta hace dos años ofrecía cierto margen de seguridad para la vida cotidiana de los numerosos residentes foráneos, han aumentado los últimos meses.

Kabul se ha convertido en territorio hostil para la menguante colonia extranjera, que vive ahora prácticamente enclaustrada, tras el punto de inflexión que supuso el ataque suicida en enero contra un restaurante libanés muy frecuentado por extranjeros.

Veintiuna personas, entre ellas 13 extranjeros, murieron en dicho ataque. Tras aquel atentado, se han sucedido en Kabul otros incidentes armados como la incursión talibán en el hotel Serena y el ataque la semana pasada contra el hostal de una ONG estadounidense en la que murieron siete personas, entre ellas una niña de diez años.

La fotoperiodista alemana Anja Niedringhaus murió tiroteada a principios de abril en el este de Afganistán en un ataque en el que fue herida grave la reportera canadiense Kathy Gannon cuando ambas cubrían el 5 de abril la primera vuelta de los comicios presidenciales afganos, cuyos resultados se anunciarán el sábado.

Los comicios están marcados por la salida del poder del presidente Hamid Karzai, tras agotar los dos mandatos posibles, y la retirada de las tropas internacionales de Afganistán a finales de este año.