En 1974, como respuesta a un golpe de Estado que pretendía la anexión de Chipre a Grecia, Turquía invadió el tercio norte y desde entonces la isla quedó dividida. Entre 150.000 y 200.000 grecochipriotas huyeron al sur y 60.000 turcochipriotas al norte, dejando atrás sus hogares, negocios y campos de cultivo.

Desde entonces, esas propiedades han permanecido abandonadas u ocupadas por refugiados del otro bando, e incluso por las fuerzas militares que Turquía envió para proteger la autodenominada República Turca del Norte de Chipre (RTNC), sólo reconocida internacionalmente por Ankara.

En 2006, la RTNC creó la Comisión de la Propiedad Inmobiliaria (IPC por sus siglas internacionales), reconocida por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y compuesta por cinco funcionarios turcochipriotas y dos representantes del Consejo de Europa.

Durante años, muy pocos grecochipriotas acudieron a la IPC para exigir la restitución de sus tierras o una compensación por su pérdida (entre 2006 y 2010 se registró una media de 168 peticiones anuales), ya que "cruzar a la otra parte" de la isla dividida aún sigue siendo un tabú para muchos de ellos.

Sin embargo, a medida que se profundizaba la crisis, más y más grecochipriotas se dirigieron a la Comisión para reclamar una indemnización y hacer así frente a sus problemas económicos: en 2011 hubo 1.926 solicitudes formales; 1.601 en 2012 y cerca de un millar tan solo en los últimos seis meses.

"En las últimas semanas se acercan a preguntar entre 15 y 30 personas al día y nos cuentan que hay mucha más gente interesada. Pero somos una oficina pequeña y no damos abasto con tantas peticiones", explica el presidente de la comisión, Güngör Günkan.

La mayoría de los casos se resuelve de forma amistosa a través de una negociación pero si hay desacuerdo se puede recurrir al Tribunal de Estrasburgo. Hasta ahora, se ha resuelto sólo el 10% de las peticiones y la RTNC ha tenido que pagar por ello unos 103 millones de libras esterlinas (122 millones de euros).