"Alguien pilotó el
avión hasta el final del vuelo, alguien pilotó el avión contra el
agua", dijo Larry Vance, quien investigó el accidente de Swiss Air en
1998, al canal 9 de la televisión australiana.
El experto comentó
anoche que el flaperón hallado el año pasado en la isla Reunión y que fue
entregado a Francia para su análisis es la evidencia más fuerte de que el
Boeing 777 de Malaysia Airlines fue "planeando" sobre el océano.
Esta hipótesis ubica el
lugar del impacto en algún punto mucho más al sur de la zona de 120.000
kilómetros cuadrados frente a las costas australianas donde se rastrea el
aparato, según los cálculos sobre el agotamiento del combustible.
Si bien Francia aún no
ha revelado sus conclusiones, Vance considera que esa pieza del ala del avión
fue desplegada para el aterrizaje y después arrastrada por la fuerza del agua,
agregó la fuente.
Por su lado, Peter
Foley, máximo encargado de la búsqueda realizada por la Oficina para la
Seguridad en el Transporte de Australia (ATSB, siglas en inglés) no descarta la
posibilidad de que alguna persona haya controlado el avión hasta el final.
El funcionario
australiano también admitió que la ATSB ha visto "algunos análisis de los
franceses" que sugieren que el flaperón fue desplegado, lo que apoyaría la
teoría de que la desaparición fue premeditada.
El mes pasado el
semanario New York Magazine reveló, apoyado en documentos del FBI, que el
piloto del avión del MH370 realizó una simulación de vuelo con una ruta
parecida a la que se cree llevó la aeronave antes de que desapareciera en el
Índico.
El vuelo MH370
desapareció en marzo de 2014 tras despegar de Kuala Lumpur rumbo a Pekín
después de que alguien apagara los sistemas de comunicación y virara el
aparato, que se habría estrellado en el océano una vez agotado el combustible.
El lugar final de esa
simulación y la zona en donde se cree que se estrelló la aeronave están separadas
por unos 1.500 kilómetros. Hasta el momento, se han recuperado cinco piezas en
la isla Reunión, Mozambique, Mauricio, Sudáfrica y la isla francesa Rodrigues,
que las autoridades han confirmado como partes del Boeing 777 desaparecido.