El ministro de Justicia de Turquía, Bekir Bozdag, ha anunciado que los resultados de las autopsias confirman el uso de armas químicas durante la masacre del 4 de abril en la ciudad siria de Idlib en la que murieron en torno a un centenar de personas, informa el diario turco 'Hurriyet'.
Según la información que barajan las autoridades turcas, las armas químicas fueron usadas de manera deliberada por el Ejército sirio y no pertenecían a las fuerzas rebeldes ni explotaron de manera involuntaria como consecuencia de un bombardeo, como aseguran desde Damasco y Moscú.
La intención de Turquía ahora mismo es la de llevar a cabo una investigación conjunta con la Organización Mundial de Salud (OMS) para averiguar exactamente el agente empleado en el ataque y que según fuentes militares estadounidenses podría tratarse de gas sarín, aunque este extremo no ha sido confirmado.