El informe que ha publicado este miércoles la Organización de Consumidores y Usuarios -OCU- ha sido realizado tras analizar el comportamiento diario del precio de los carburantes en más de 7.500 gasolineras de España, desde mediados de septiembre hasta finales de 2012, según datos suministrados por el Ministerio de Industria.

En el estudio se afirma que la Comisión Nacional de la Energía -CNE- ha denunciado en varias ocasiones una práctica que consiste en rebajar sustancialmente el precio de los carburantes los lunes, para después volver a subirlo.

Esta práctica, que la OCU viene observando desde septiembre de 2012, "parece intensificarse con el tiempo", ya que los descuentos eran inicialmente menores al 1%, pero a finales de año ya se superaba esta cuantía los lunes.

Para Repsol, Cepsa y Campsa, las tres principales marcas en España, el lunes es el día en el que los carburantes son un 1% más baratos, en algunos casos el 2%, salvo en algún caso coinciciendo con puentes y fiestas.

Esto, según la OCU, supone "un indicio claro de la falta de competencia" en España puesto que " en un mercado que ha visto variaciones del precio del diesel de más del 10% en poco más de un mes, es muy sospechoso que las tres compañias principales mantengan sus distancias intactas.

Esta bajada de los precios los lunes no responde a cuestiones de demanda, sino a que ese día de la semana se le comunica a Europa los precios de las gasolineras. Por ello, se produce "una distorsión y un engaño a dicho mecanismo de control europeo", mostrando precios más bajos de los que en realidad son.

Otras empresas, como BP o Petronor, apuestan por los martes, una discrepancia que, según la OCU, "podría estar en un intento de diferenciación o en un retraso en comunicar sus precios al ministerio de Industria". Los mayores distribuidores, Carrefour, Eroski y Simply, asociada a Alcampo, también coinciden en el efecto martes.

Según este informe de la OCU, el Gobierno no tiene interés en corregir este "efecto lunes" porque eso le permite "salir mejor parado en la comparación de precios de carburantes entre países y porque puede servirle para camuflar subidas de precios con malos efectos en la inflación.