Esas variaciones, coincidiendo con el aumento de los desplazamientos por carretera, llevan a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) a observar "una estrategia de fijación de precios", tanto en gasolina como en gasóleo, según el informe de supervisión de distribución de carburantes en estaciones de servicio de marzo.

En ese mes, los precios después de impuestos de la gasolina 95 (1,469 euros) y del gasóleo A (1,385 euros) cayeron por primera vez desde finales del año pasado, indica el informe. No obstante, los precios antes de impuestos se situaron en las posiciones más altas con respecto al resto de países de la Unión Europea.

En cuanto al margen de las empresas distribuidoras de carburantes de automoción, en marzo creció nuevamente, 5,9 % y 3,5 % para la gasolina 95 y para el gasóleo A , respectivamente. La CNE señala que a principios de mes estos márgenes alcanzaron valores puntuales muy elevados, de 19 céntimos por litro para la gasolina 95 y de 17,7 céntimos en el gasóleo A.