Los nervios de su madre, el orgullo de su hermano y la ilusión de toda su familia. Con aplausos y mucha emoción ha vivido la familia de Queralt Castellet su medalla de plata en los Juegos Olímpicos de invierno.

"Ha sido una pasada. Es una alegría inmensa", dice su madre en 'Jugones', que ha acompañado a la familia en un día histórico. "Nos ha hecho sufrir un buen rato...", reconoce.

Lo celebraban brindando con cava a primera hora de la mañana. "He llorado mucho", reconoce su padre.

"Le daré un abrazo inmenso cuando la vea", dice su madre, más orgullosa que nunca. Porque Queralt ha hecho historia en el deporte español.