Silicon Valley es considerada como la capital tecnológica mundial, aunque también es un lugar de arraigo de muchas nuevas tendencias y pseudociencias. La última que se ha puesto de moda, según informa la BBC, es la de no consumir agua que haya pasado por las tuberías o se haya embotellado por el método tradicional.

En su lugar, ha nacido el agua 'cruda'. Se trata de agua sin ningún control sanitario que se obtiene directamente de un manantial y que se envasa y distribuye sin tratarse químicamente ni filtrarse.

Según los médicos, este consumo es un peligro porque el agua puede contener bacterias, virus, parásitos e incluso células cancerígenas. De esta manera, su consumo puede provocar diarreas y otros procesos gastrointestinales.

El agua mineral que consumimos habitualmente, si bien también puede ser extraída directamente del manantial, pasa unos análisis que confirman que puede ser consumida sin riesgo. Sin embargo, en el caso del agua 'cruda', estos análisis se omiten.

Los defensores de consumir agua 'cruda' aseguran que a diferencia del agua de grifo, esta tiene más nutrientes y no contiene aditivos como el fluoruro, ya que no pasa por las tuberías. Sin embargo, ninguna de sus afirmaciones tiene una base científica.