El presidente de la Generalitat y cabeza de lista de ERC, Pere Aragonès, se ha mostrado abierto a hacer un debate "cara a cara" con el candidato de Junts, Carles Puigdemont, en Perpiñán (Francia), así como a hacer otros debates que incluyan a los demás candidatos. En unas declaraciones a TV3, Aragonès se ha mostrado satisfecho con el debate que tuvo lugar ayer en el Senado en torno a la ley de amnistía, y ha insistido en su afirmación de que tanto la financiación singular como el referéndum "son inevitables", aunque el PSOE rechace ambas cosas ahora mismo.

Según el presidente de la Generalitat, el objetivo de intervenir en el Senado era "defender los intereses de Cataluña, y especialmente la amnistía" en "todos los lugares posibles", y ha explicado que se siente "cómodo" defendiendo "los intereses de Cataluña en todas partes".

Sobre su objetivo de ir al Senado para "trolear al PP", Aragonès ha indicado que "el PP quería enfocar el debate como un paseo militar, un monólogo, y al final hubo una confrontación de argumentos". Respecto a las críticas del PSOE de que "había hecho el juego al PP" ha negado esta interpretación y ha recalcado que "si el PSOE quería criticar lo que hace el PP, haber ido", porque "no se puede dejar la portería vacía".

Según Pere Aragonès, no le sorprende que el PSOE rechace sus propuestas y ha puesto el énfasis en que "lo que un día es un no, puede ser un sí, si se tiene la fuerza política para hacerlo posible". En clave electoral, ha señalado que hará "todo lo posible para que haya un debate con todos los candidatos en Perpiñán, aunque no creo que PP y Vox quieran ir" a este lugar para debatir entre todos los candidatos.

"Quiero poder debatir con quien haya, es bueno que se hable de proyectos", ha indicado, y ha subrayado que él está dispuesto "a un cara a cara" con Puigdemont, y ahora son los equipos electorales los que tienen que concretar si es posible llevarlo a cabo. Sobre la necesidad de debatir proyectos, el presidente ha querido dejar claro que él no se ha "movido" respecto a su apuesta por la negociación con el Estado.

"Yo mantengo el rumbo", ha dicho, mientras que "otros liderazgos no pueden decir lo mismo". "Hemos escuchado a Junts decir que negociar con el Gobierno español era traicionar al país y ahora han cambiado de opinión, lo celebro, y son bienvenidos", ha afirmado Aragonès, que ha explicado que "están en juego muchas cosas".