El 70-80% de las intoxicaciones infantiles son debidas a ingestas accidentales y un 10% por error de dosis, pero no olvidemos que un 9% de ellas, son intoxicaciones voluntarias en un intento de suicidio en mayores de 12 años, especialmente en chicas.

Mensajes tranquilizadores de las intoxicaciones.

La mayoría de las veces son asintomáticas, es decir, el niño no presentará ningún síntoma. Habitualmente tienen un final feliz y no necesitan intervención terapéutica. En la mayoría de los casos los niños toman sustancias no peligrosas que no necesitarán tratamiento.

¿Qué debes hacer?

  • Si el tóxico ha entrado en contacto con piel o con los ojos, lávalo con abundante agua y retira el producto.
  • Si ha inhalado el tóxico, saca al niño inmediatamente a un lugar ventilado.
  • Llama al Servicio de Información Toxicológica Tlfo: 915620420 o al 112.
  • Ante la duda, acude a Urgencias con el envase original de lo que ha tomado y calculando el tiempo que ha transcurrido.

¿Cuándo acudir a Urgencias?

  • Si no sois capaces de contactar con el servicio de información de toxicología.
  • Si lo que ha ingerido han sido medicamentos, drogas, productos de limpieza tanto de hogar, industrial como productos de automóvil o pinturas.
  • Aunque no tengas la certeza, si sospechas que ha ingerido algo y además tiene síntomas.

¿Qué no debes hacer?

  • Nunca se debe provocar el vómito.
  • No se debe administrar ningún alimento, ni bebida, ni leche, ni siquiera agua.
  • No subestimar el caso. Siempre has de consultar con el 112 o el Servicio de Información Toxicológica: 915620420

¿Cómo podemos prevenirlos?

  • Cuando compres productos de limpieza y jarabes infantiles asegúrate que estos tienen tapón de seguridad.
  • Los productos de limpieza deben estar siempre en su envase original. Jamás los traspases a una botella de agua mineral o de refresco; esta es una de las causas más frecuentes de intoxicación accidental en niños y adultos.
  • Guarda todos estos productos fuera del alcance de los niños: esto parece una obviedad, pero el lugar más habitual donde se guardan productos de limpieza sigue siendo debajo del fregadero y uno de los lugares más frecuentes donde encontramos medicamentos es en las mesitas de noche, especialmente atractivas y accesibles para los niños pequeños. Todos estos productos deben estar en altura y sin estar a la vista para que no llamen la atención.
  • Los jarabes anticatarrales y el paracetamol son la primera causa de intoxicación medicamentosa en los niños y una de las principales causas de ingreso en UCI por este mismo motivo. Aunque tú los veas inofensivos, son causa de daños graves si se ingieren en grandes cantidades.
  • Los errores mantenidos y repetidos en el tiempo en la dosis de determinados fármacos, por ejemplo, del paracetamol, tiene más riesgo de hepatotoxicidad que una dosis única alta así que, ojo a la hora de las dosis de fármacos.
  • Asegúrate que se lo das con jeringuilla y no con cucharilla que tiene más margen de error.
  • Asegúrate que la dosis se ha calculado en función de su peso, sobre todo en los niños más pequeños y no en función de su edad.
  • Cuando le des una medicina no lo disfraces diciéndole que es un caramelo o una golosina ya que el mensaje que puede recibir el niño es el de que ni es peligroso y encima “es un premio”. Muchos fármacos tienen colores y formas llamativos y los niños pueden confundirlos con chuches.
  • Ojo con los pastilleros de los abuelitos: para un niño pequeño una cajita siempre es atractiva. Abrirla es un reto y encontrar varias pastillas de distintos colores, un tesoro. En su pequeño cerebro eso son caramelos hasta que no se demuestre lo contario.
  • Asegúrate de compartir esta información con los abuelos y cuidadores de tus hijos.