En un comunicado, la Policía informó de que pudo liberar a la menor y detener a su presunto captador por delitos de trata de seres humanos en grado de tentativa e inducción al abandono del domicilio familiar.

Los agentes iniciaron las actuaciones tras recibir una llamada telefónica al servicio de atención a las víctimas de trata de un varón que aseguraba que un familiar suyo, la menor de 16 años, se había escapado de su domicilio donde vivía con su madre y su hermana.

Según los datos facilitados por el familiar de la chica a la Policía, esta podría hallarse en casa de su novio o amigo del que sabía que era de nacionalidad rumana y al que había conocido a través de las redes sociales.

Los investigadores confirmaron la relación con ese chico, de 25 años, y que la menor estaba siendo forzada o coaccionada a abandonar el domicilio familiar en periodos de cuatro o cinco días por semana, tiempo en el que la madre de la menor desconocía su paradero y circunstancias de vida.

Según la Policía Nacional, a su regreso, la joven tan solo decía que había estado con su novio en Coslada (Madrid), sin dar ningún tipo de información sin autorización de su pareja. En menos de un día, los agentes localizaron y liberaron a la chica y detuvieron al joven como presunto autor de un delito contra la trata de seres humanos en grado de tentativa e inducción al abandono del domicilio familiar.