Según han informado fuentes de la investigación, el hombre ha sido detenido cuando volvía a su casa, confiado en que el operativo de búsqueda estaba desplegado por los montes de Camaleño siguiendo su rastro. Agentes de la Guardia Civil esperaban ocultos al individuo en las proximidades de su domicilio, hasta que han conseguido detenerle tendiéndole una trampa.

Fuentes de la investigación han señalado que el detenido ha sido trasladado a la Comandancia de la Guardia Civil en Cantabria, situada en Santander.

La detención de Luciano José Simón ha sido posible gracias al amplio dispositivo de búsqueda que había establecido la Guardia Civil para buscarle, después de que el hombre se fugara de su casa de Turieno, donde estuvo atrincherado 11 horas y de la que salió armado sin ser visto, tras disparar a los agentes, uno de los cuales resultó herido.

El hombre, considerado "extremadamente peligroso" por la Guardia Civil, tiene antecedentes por drogas, lesiones, robo con fuerza y atentado contra la autoridad, y se atrincheró en su casa después de que su hermano llamara al instituto armado.

El hermano avisó porque Simón, como se le conoce en la comarca de Liébana, había amenazado con una navaja a varios familiares, según informó el coronel jefe de la Guardia Civil en Cantabria, Luis del Castillo.

Una patrulla de la Guardia Civil llegó a Turieno y al acercarse a la casa de Simón, éste cogió una escopeta, aunque no tiene licencia de armas, y comenzó a disparar. Tras los disparos más agentes de la Guardia Civil llegaron al pueblo lebaniego, de unos cien habitantes y situado al lado del Parque Nacional de los Picos de Europa, y permanecieron toda la madrugada del miércoles en la localidad, mientras el hombre seguía disparando, lo que hizo en "más de veinte ocasiones".

La Guardia Civil pidió a todos los vecinos de Turieno que permanecieran dentro de sus casas con las persianas bajadas y las contraventanas cerradas, y solicitó apagar la luz del pueblo, hasta que en uno de los momentos el hombre disparó contra los agentes, uno de los cuales, un guardia civil de 49 años, resultó herido en un pie, aunque sus heridas no revisten gravedad.