La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Córdoba ha condenado a un hombre a una pena de ocho años y seis meses de prisión, el pago de una indemnización de 10.000 euros y una orden de alejamiento de once años, por la supuesta comisión de un delito continuado de abusos sexuales sobre una de sus hijas menores de edad, al tiempo que ha sido absuelto de otro mismo delito presuntamente cometido sobre otra hija menor.

Según recoge la sentencia, el acusado en su declaración, en la que negó los hechos, ha caído en "contradicciones que deben ser destacadas", que "sirven de forma indiciaria para obtener el convencimiento de que efectivamente tal contradicción sirve como una corroboración más de la declaración de la menor", quien describe los hechos "con todo lujo de detalles", apostillan los jueces.

En relación a la situación con la otra hija, en la que ha sido absuelto, los magistrados apuntan que "no existe prueba de cargo suficiente para condenar" al varón, después de que entienden que la declaración de la menor "carece de la más mínima corroboración periférica".

Al respecto, entre los años 2006 y 2009, el acusado, "con evidente ánimo libidinoso, aprovechaba diversas ocasiones en las que jugaba con su hija, para hacerle tocamientos" a una de sus dos hijas, entre los 11 y 15 años. Unos hechos que presuntamente los realizaba "sobre todo en verano".

Como consecuencia de esta situación "reiterada", la menor ha sufrido un cuadro de trastorno ansioso-depresivo, por el que recibe tratamiento médico y psicológico, según apuntan los magistrados, que señalan que "no ha quedado acreditado que el acusado, con idéntico ánimo libidinoso, tocara a su hija menor".