El peor día de la vida de Carlos García Revenga fue el 23 de febrero de 2013, cuando declaró como investigado ante el juez Castro: "Nunca olvidaré la anterrampa y la rampa hasta llegar al Juzgado de Palma. Estabas a medio metro de la gente que había en la acera. Me podían llamar hijo de puta 500 veces, chorizo, ladrón…".

Conserva más de un recuerdo: "No hacen fotos, ametrallan, aquello era un ruido ensordecedor. Luego habían adelantado el arco y creo que no era necesario ponerlo en la puerta: me tuve que quitar la chaqueta, te quedas ahí como desnudo vaciando los bolsillos".

En el programa Te doy mi palabra de Isabel Gemio, ha asegurado que estuvo imputado, sin saber por qué: "Estuve imputado año y medio sin cargos". Y recuerda que le desimputaron en junio de 2014: "Todavía hay gente que me llama para darme la enhorabuena, y le digo pero si no fui a juicio".

Defiende que infanta Cristina y a su marido, lo han pasado mal: "Es un poco como la canción de Alejandro Sánz: con el Corazón Partío". Mantiene que la infante no fue consciente de nada: "Me molesta mucho que comparen a doña Cristina con Isabel Pantoja. Está demostrado que en ningún momento ha manejado dinero más allá de los gastos de la tarjeta".

E incluso cuestiona que condenen al yerno del rey emérito por prevaricación: "Tú te imaginas que con lo que está saliendo de Mata, que Iñaki le haya obligado a prevaricar". Como secretario de las infantas dice que Urdangarín le pedía consejo: "Me consultaba muchas cosas, como dije también en algunas me hacía caso y en otras no". Dice que se sorprendió cuando en sede judicial Iñaki aseguró que estaba al tanto de todo.