El Departamento de Niños y Familias de Florida publicará un documento sobre Nikolas Cruz, autor confeso de la matanza en una escuela de Florida, en el que señala que el joven sufría depresión, déficit de atención y autismo.

En un caso abierto en septiembre de 2016, el DCF calificaba a Cruz de persona "vulnerable" con varios problemas mentales, lo que llevó a los médicos a recetar uno o más medicamentos para esos desórdenes, según'The Miami Herald'.

Este informe vendría a fundamentar la postura de la defensa de que las autoridades no hicieron caso a las sistemáticas "peticiones de ayuda" de Cruz.

Tras confesar los asesinatos, la duda durante el proceso judicial es si Cruz será sentenciado a la pena de muerte o cadena perpetua, y el estado de su salud mental será fundamental en esta decisión.

Durante los interrogatorios, Cruz dijo que escuchó voces en su cabeza que le indicaron cómo perpetrar el ataque, voces que fueron descritas como "demonios".