¡ATENCIÓN PADRES Y MADRES!

Muere un niño por sarampión: síntomas y cuándo buscar ayuda

La erupción cutánea es el síntoma más característico del sarampión: suele comenzar en la cara y detrás de las orejas, y luego se extiende al resto del cuerpo.

Erupción cutánea provocada por sarampión

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Hace unos días, un niño falleció en Liverpool por sarampión. Tal y como informó la BBC, el hospital donde tuvo lugar este suceso se abstiene de hacer comentarios sobre casos individuales por motivos de confidencialidad, pero ruega a los padres que estén atentos.

"Nos preocupa el creciente número de niños y jóvenes que contraen sarampión. El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa que puede causar graves problemas de salud en los niños, que requieren tratamiento hospitalario y, en casos excepcionales, la muerte", explicaba el hospital en un comunicado.

Como mencionan, el sarampión es una infección infantil causada por un virus. Este se trasmite con facilidad y puede ser grave e incluso mortal para los niños pequeños. Hoy en día, con la vacuna no se ha generalizado el sarampión, pero siempre puede haber excepciones como la de este niño que murió hace unos días.

Tal y como aseguran desde el medio Mirror, los síntomas tempranos del sarampión incluyen:

  • Temperatura alta
  • Nariz que moquea o congestionada
  • Estornudos
  • Tos
  • Ojos rojos, doloridos y llorosos

También pueden aparecer manchas blancas en el interior de la boca y la parte posterior de los labios, junto con una erupción cutánea, el síntoma más característico del sarampión. Esta erupción suele comenzar en la cara y detrás de las orejas, y luego se extiende al resto del cuerpo, creando zonas de la piel con manchas y relieve que no suelen picar.

Niño con sarampión
Niño con sarampión | iStock

¿Cuándo buscar ayuda?

Según el NHS, el sistema de salud público del Reino Unido, se recomienda acudir urgentemente al médico si ocurre lo siguiente:

  • Crees que su hijo menor de un año ha estado en contacto con alguien que tiene sarampión.
  • Estás embarazada o inmunodeprimida y has estado en contacto con alguien que tiene sarampión.
  • La persona enferma tiene fiebre alta que no baja con medicamentos.
  • La persona enferma tiene dificultad para respirar.
  • La persona enferma no se alimenta bien o toma menos líquidos de lo habitual.
  • La persona enferma orina menos de lo habitual o tiene menos pañales mojados.

Si el sarampión no se trata, puede provocar complicaciones graves a medida que la infección se propaga a los pulmones y al cerebro, lo que puede provocar afecciones como neumonía, meningitis, ceguera y convulsiones.

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