El Gran Wyoming se ha cuidado y se ha 'portado' muy bien a lo largo de la epidemia de coronavirus que sigue azotando a nuestro país. El presentador de El Intermedio ha salido de casa menos de lo imprescindible: hasta la llegada de la fase 1, no ha puesto un pie en la calle. Y ha relatado su experiencia en laSexta Noche.

"Salí la primera semana un día a comprar, y hasta ahora", ha contado Wyoming, que, según ha continuado explicando a Iñaki López, ha aprovechado el tiempo de confinamiento para introducirse en distintos foros médicos con el objetivo de conocer cómo afrontaban los profesionales sanitarios esta situación en términos laborales y personales.

En otras palabras, Wyoming, dada su formación como médico, ha querido empatizar con "la cercanía de su trabajo diario", y así lo ha explicado: "Esta gente no solo va a trabajar. Va a la primera línea, como en las trincheras, con gente que ha dado positivo. El presentador apunta además que estos sanitarios "no tienen la perspectiva de la vacuna" porque "van aprendiendo" poco a poco, según avanza la situación.

Durante su intervención, el presentador también ha puesto de manifiesto "la necesidad que había de descargar los hospitales" frente a la trágica crisis sanitaria para poder tratar de forma más eficaz y completa a los pacientes que llegaban presentando síntomas, una situación a la que, según ha denunciado, se han enfrentado los trabajadores en condiciones muy precarias: "Ha sido tremendo".

"Los hospitales ya estaban saturados antes, las UCI estaban llenas, no había camas", ha proseguido Wyoming, que ha destacado que, si la situación sanitaria era ya de por sí complicada antes de la pandemia "esto les ha pillado trabajando en condiciones de estrés y de frustración por no poder ayudar a todos los que podían". No obstante, se muestra optimista sobre el fin de la pandemia, y ha añadido: "No hay que generar falsas expectativas, pero puede ocurrir que, tal como vino el virus, se vaya".

Finalmente, Wyoming también ha querido denunciar los actos y gestos de irresponsabilidad de los que ha tenido conocimiento desde la puesta en marcha del plan de desescalada del Gobierno. Si bien cree que los sanitarios viven esta crisis "como una película de terror", lamenta que haya gente que no sea consciente de la gravedad de la cuestión: "No nos damos cuenta de que a nosotros, aunque a lo mejor parezca que ni nos va ni nos viene, podemos causar mucho daño a terceros".