Francisco Javier Martínez tuvo una vocación temprana, así lo contó en la tele hace más de 20 años. Su precocidad le lleva a ser a los 37 años obipso auxiliar de Madrid, el más joven de España. En palabras de Jesús Bastante, "fue el obispo más joven de España durante mucho tiempo".
Miembro del grupo 'Comunión y Liberación', su duro discurso contra el aborto le hace famoso. "A nuestro juicio, el aborto es un crimen, es una plaga que tiene características de un genocidio", expresaba en 1991. A principios de los 90 la cúpula de la iglesia madrileña decora sus ruedas de prensa con imágenes en contra del aborto.
Su ascenso es imparable, en 1995 le nombran obispo de Córdoba. Esa etapa se acabará cerrando con un espisodio desagradable, la condena a 11 años a un cura de su diócesis por abuso sexual de una niña.
La preocupación de monseñor por la situación de la mujer le lleva a participar en la publicación de un libro muy especial, el manual para mujeres casadas con un título esclarecedor, 'Cásate y sé sumisa'. En total, 180 páginas a bases de frases así: "Cuando tu marido te dice algo, lo debes escuchar como si fuera dios el que te habla".
El dogma se le da bien, con las finanzas lo pasa peor. Durante sus 11 años como arzobispo, la archidiócesis de Granada multiplica su deuda por 25. El agujero pasa de 1,2 millones a más de 30. Además, Martínez tiene el dudoso honor de ser el primer obispo español en sentarse en el banquillo de los acusados. Fue a juicio por una denuncia por acoso laboral de uno de sus párrrocos. Al final, se libró porque el delito había prescrito.
Francisco Javier Martínez, arzobispo de granada, 30 años como prelado rodeado de polémica. Es ahora cuando vive su momento más crítico, su actitud ante los abusos sexuales en Granada le ha puesto en el punto de mira.
FUE EL PRIMER OBISPO QUE SE SENTÓ EN EL BANQUILLO