José Ramón es el alcalde de Ribera de Arriba y, durante 10 años, se enfrentó casi sin apoyos a Hidrocantábrico, el cuarto mayor productor de energía eléctrica en España. Su objetivo era conseguir que la compañía pagase los impuestos que le correspondían por la instalación de una central de ciclo combinado y no sólo los costes de obra civil. Tras una década de presiones institucionales, de la empresa y de los medios, ganó la batalla legal.