Rafael Pérez estuvo atrapado dentro de la avalancha que se produjo en la fiesta de Halloween del Madrid Arena. Él consiguió salir y ayudar a una chica que también había quedado atrapada. Un amigo suyo quedó sepultado por cinco personas. Afortunadamente, Rafael, con otros dos amigos, pudo ayudar a su amigo a salir. La avalancha se produjo en un estrecho pasillo donde, en un instante, quedaron atrapados cientos de jóvenes.
Rafael ha desmentido que las bengalas fueran el detonante de la estampida. Según Rafael, la principal causa de la tragedia fue la cantidad de gente que había en la fiesta. "Se juntaron en una puerta estrecha la gente que quería entrar con la que quería salir. El personal de seguridad se echó las manos a la cabeza de ver la tragedia que se estaba produciendo".
Rafael ha contado como el personal de seguridad trató en vano de liberar a gente. "Una chica me pidió que le ayudara a salir, que no podía respirar. Yo llegué a temer por mi vida".