Es el mayor asentamiento de inmigrantes ilegales de la ciudad. 120 personas según el Ayuntamiento y hasta 300 según las organizaciones que apoyan al colectivo.

Muchos han llegado hasta esta localidad, atraídos por un falso rumor de regularización express.

Los inmigrantes se han dado una semana de plazo y estarán asentados en la iglesia hasta el 31 de julio. Pedirán una reunión con el ayuntamiento hasta que este centenar de personas puedan acogerse a los planes de asentamiento del consistorio.

Las plataformas de ayudas a este colectivo de inmigrantes aseguran que el ayuntamiento, a pesar de que el desalojo estaba previsto desde hacía tiempo, solo ha realojado a 15 personas. Lo que se contradice con el argumento de los portavoces del consistorio, que aseguran techo a todas estas personas.