Andrea Rega, reportera de Univisión en Dallas, ha explicado que la explosión de la fábrica de fertilizantes ha sido comparable con el impacto de un terremoto de 2,1 de magnitud. El alcalde de la localidad ha comparado lo acontecido con la "caída de una bomba nuclear". Las autoridades han hecho un llamamiento a los ciudadanos para la donación de sangre. Según Rega, los equipos de rescate continúan su labor esquivando numerosos peligros.

La reportera destaca como buena noticia la lluvia que ha caído sobre la zona afectada, y que ha contribuido a sofocar el incendio. Aún se desconocen las causas que han provocado la explosión, y las autoridades no descartan ninguna hipótesis. Los vecinos de la localidad sintieron el estruendo de la explosión desde sus domicilios. "Las ventanas estallaron y se tuvieron que tirar al suelo tras la explosión. Muchos tuvieron que huir de la zona rápidamente para salvar sus vidad", ha explicado la reportera.

La planta química que ha explotado estaba bajo sospecha. Fue multada en el año 2006 por carecer de un plan de emergencia de acuerdo con los requisitos federales. Se trata de una fábrica que procesaba amoníaco puro, usado para producir fertilizantes.