A una semana de las elecciones generales del 10 de noviembre, el diputado de ERC Gabriel Rufián ha asegurado que los comicios son "una auténtica irresponsabilidad", pero que la sentencia del procés ha dejado "muchas ganas" de respuesta en las urnas.

El líder independentista ha asegurado que es "muy mala noticia la presencia de partidos como Vox en las instituciones", y ha incidido en que "el problema no es tanto sacar a Franco de un mausoleo franquista, sino que lo bueno sería sacarlo de tribunales o parlamentos. Lo malo es que hoy en día el franquismo se vota".

Respecto a las protestas tras la sentencia del procés, en las que se oyeron insultos al propio Rufián, el diputado ha defendido que las fuerzas de seguridad deben actuar "con proporcionalidad": "La Policía está para evitar problemas, sobre todo para no crearlos". "Pedimos explicaciones al ministro de Interior, Marlasca, y al conseller de Interior, Buch", ha sentenciado el político.

"No son de los nuestros aquellos que van con un cóctel molotov", ha aclarado Rufián, que ha condenado la violencia, aunque ha pedido no criminalizar las protestas.

El diputado no ha respondido con claridad a la pregunta de Cristina Pardo de por qué cree que le abuchearon durante las protestas: "Creo que cualquiera que me oiga llorar porque me pintan en una manifestación seguramente pensará, vente a mi trabajo que aguanto mucho más cada día".

"Lo importante de aquel día es que conseguimos rebajar la tensión. Si la catarsis de insultarme a mí funcionó, bienvenido sea, estoy dispuesto a que me insulten 150 veces más para evitar según que imágenes", ha sentenciado.

Sobre la posible responsabilidad de Quim Torra en los disturbios, el diputado ha reiterado que "respeta" el espacio "convergente". Además, Rufián ha explicado que la solución al conflicto catalán es "multilateral": "Estamos sentados en una mesa de diálogo. Todo el mundo minimamente demócrata piensa que esto se soluciona hablando".

"Esperamos que el PSOE sea lo suficientemente débil este 10 de noviembre para no poder elegir y sentarse con nosotros en una mesa de diálogo", ha apuntado. Aun así, Gabriel Rufián ha asegurado que "el acto de generosidad que hizo el republicanismo catalán en julio fue enorme", y que la pregunta no es qué hará ERC, sino qué hará Sánchez en las negociaciones tras el 10N: "Si el PSOE cae derrotado en Cataluña tendrá que sentarse en la mesa de negociaciones".