Las vacaciones nunca han sido un alivio para todos aquellos que tienen hijos y no saben cómo organizarse. Mientras en un barrio rico echan mano de campamentos o de personas que cuiden de sus hijos, en uno obrero no pueden permitirse ese lujo y piden ayuda a los más mayores: los abuelos.

Sumidos en plena crisis económica son muchas las personas que tienen que pedir ayuda a sus familiares para salir adelante. Los vecinos de los barrios obreros confiesan ayudar continuamente en las cosas más básicas como comer o mantener sus casas. Por otro lado, los vecinos del barrio rico no tienen ese tipo de problemas y, por tanto, no tienen preocupaciones para llegar a fin de mes.

Pero no sólo se nota en temas familiares... Mientras los ciudadanos de un barrio obrero afirman no haber tenido la oportunidad de tener un billete de 500 euros en sus manos, algunos del barrio rico lo han llegado a tener incontables veces en su cartera o incluso llegar a coleccionarlos. Y eso no es todo... Thais quiso saber qué es lo que harían si les diese uno en ese momento y las diferencias entre ambos barrios son más que notables: unos tapar agujeros y otros gastarlo en caprichos.

Con el escándalo de los papeles de Panamá, Thais Villas quiso conocer de primera mano si hay diferencias en ambos barrios en el hecho de tener conocidos que puedan tener cuentas en el extranjero. La respuesta del barrio obrero fue clara: no tienen "ese gusto" y no toleran a la gente que lo hace; por el contrario, los del barrio rico conocen "bastante gente" en su entorno...

¿Y qué dirías del amor? Hasta en esto la diferencia es clara. Mientras unos destinan grandes cantidades de dinero a viajes, cenas o regalos por todo lo alto para satisfacer a sus parejas en San Valentín, otros se tienen que conformar con "detalles".

La moda no podía faltar en las investigaciones de la reportera. Así, Thais dio con el increíble resultado de que los vecinos del barrio rico se definen con estilo "exclusivo y sofisticado" y afirman gastarse de 600 a 3.000 euros por temporada, y los del barrio obrero con un estilo "personal" comprando lo que les gusta pero sin llegar a gastar más de 50 euros por temporada.