Mikel Ayestaran vuelve a El Intermedio para analizar la última hora de la guerra en Ucrania. Desde Odesa, una de "las joyas codiciadas por Vladimir Putin", el corresponsal explica que en la ciudad se vive con "aparente normalidad", si bien el miedo a un ataque nuclear está muy presente: "Aquí nadie duda que el presidente ruso puede utilizar el arma nuclear", afirma.

El periodista cuenta que las autoridades con las que ha hablado creen que, a la velocidad que marcha la ofensiva ucraniana, "en seis o nueve meses podrían ir acabando con la presencia de los rusos en los territorios ocupados, incluso Crimea, dicen los optimistas". Sin embargo, señala que lo que se teme es qué pasaría el día después de liberar los territorios y cómo sería la reacción de Putin. Sus reflexiones al completo, donde también analiza la decisión de Zelenski de no negociar la paz con el presidente ruso, en el vídeo sobre estas líneas.