Nor Rail es de Afganistán e Iñigo es del País Vasco. La ONG 'Refugees Welcome' les puso en contacto y desde entonces ambos viven en el piso de Iñigo."Me había ofrecido en Refugees Welcome y me llamaron diciendo que había una posible persona. Me sorprendió porque tenía unos estereotipos sobre las personas de Afganistán y me encontré con él, que hablaba español y parece de Jaén", explica Iñigo.

"Como todo el mundo sabe, en Afganistán las cosas están complicadas y decidí venir a España para empezar una nueva vida", cuenta Nor Rail. La relación entre ellos dos es como entre dos amigos y Nor Rair comenta que incluso le ve "como a un padre".