¿Cómo se haría? Pues en principio no de golpe, hablamos de 5.200 millones. Una parte se devolvería en 2015 y la otra en 2016, año de elecciones generales. De ahí también que el Gobierno quiera tener un buen gesto con los funcionarios.

La paga extra podría abonarse en metálico. Recordamos que el Gobierno prometió que se devolvería la paga extra de navidad en 2015, como se está planteando ahora, pero en forma de aportaciones a fondos de pensiones, algo que ahora parece descartarse.

Los sindicatos insisten, tiene que llegar a las cuentas de los funcionarios en dinero y ya, además de que muchos ni siquiera tienen un fondo de pensiones.

Podría haber más medidas positivas para los empleados públicos. Por ejemplo, devolver el moscoso que está pendiente. Dos de los tres que se suprimieron también en 2012 ya se han reintegrado, incluso podrían ampliarse a uno más.

Rescatar los canosos, los días libres por antigüedad, es también otra posibilidad. Así que pequeñas alegrías, parece, porque de momento no hay nada decidido en firme, para un colectivo importante. Tres millones de votantes más sus familias.