"Si hubiera estudiado estaría no sé en dónde. Gracias a Dios que me ha dado inteligencia y me he desempeñado en muchos cargos importantes, solo dominando las cuatro operaciones. Pero la pobreza y el deber familiar a veces no le permite a uno estudiar", así ha explicado entre lágrimas su situación con una voz entrecortada y nostálgica.

El vídeo se ha vuelto viral después de que la doctora Jem Paredes publicara su testimonio en las redes sociales. "Usted es un ejemplo para todos nosotros de que nada es un impedimento. Este señor transmite esperanzas y, definitivamente, es un ejemplo para todos. No hay límites para seguir aprendiendo", señalaba Paredes.

Ambrosio termina el vídeo con un mensaje para los más jóvenes: "Yo soy muy sensible, doctora. Quiero ser como un espejo para muchos jóvenes, ya que conmigo estudian señoritas de 14 o 15 años que no saben leer, y en esta época no puede pasar eso".