Medicarse con ansiolíticos o psicofármacos puede llegar a incapacitar a un conductor. Por eso, uno de los objetivo de la nueva ley de Seguridad Vial, que se tramita en el Senado, es regular el consumo de fármacos. Se incrementará de 500 a 1.000 euros la sanción por conducir bajo los efectos de las drogas, incluyendo como tales determinados medicamentos.

La DGT anuncia que triplicará los controles de fármacos en los próximos dos años, aunque la forma de llevarlos a cabo no es fácil. A día de hoy la Guardia Civil utiliza el medidor Draguer 5.000. Se usa para detectar drogas ilegales, aunque también podría servir para medicamentos como el Valium. Se estudia aumentar estos controlores junto a las extracciones de sangre y las pruebas salivales.

Los últimos datos oficiales del Instituto de Toxicología apuntan que el 47% de los muertos de 2012 tenían drogas, alcohol o psicofármacos en sangre.