Ame es graduada y tiene un máster. Además, habla español, inglés, francés, portugués y japonés de forma fluida. Sin embargo, no encuentra trabajo.

"Por lo visto, mi currículum y mi nivel de estudios llama la atención a la gente de recursos humanos y tengo bastantes entrevistas, pero nunca consigo una respuesta positiva a esas entrevistas", lamenta Ame.

El rechazo, dice, llega cuando en la entrevista la identifican como mujer transexual. "Es una realidad que soy una mujer trans y es algo que ni quiero esconder, ni puedo".

El 85% de las personas trans están en el paro, como Diana que se visibilizó como mujer transexual hace dos años y ahora, dice, en las entrevistas sufre una triple discriminación: por ser mujer, transexual y mayor de 45 años.

Dos veces, cuenta, la han descartado al no coincidir su nombre con el del DNI. "Tengo un dinero ahorrado y cuando se acabe, si no me contratan, vivo al lado de polígono Marconi. Es que no sé que hacer", cuenta Diana Cardo.

Por eso, la importancia de campañas como 'Stop Transfobia' que, entre sus proyectos, cuenta con un taller de reinvención profesional para personas trans en el paro. Belén García, gerente de la agencia para el empleo de Madrid, explica que se trata de "trabajar enfocado al talento que las participantes tienen".

La iniciativa consiste en una beca de cuatro meses para 15 personas con la posibilidad de dar trabajo, al menos, al 50% de las usuarias. Juan José Adrados, profesor del taller de reinvención profesional, dice que "lo que se intenta es que la auténticas protagonistas de la búsqueda de empleo sean las participantes del programa".

"Nos ha ayudado a descubrir nuestras fortalezas y debilidades", cuenta una de las participantes.

Ellas afirman que solo piden que se les brinde una oportunidad para insertarse en el mercado laboral con una oferta de trabajo que no discrimine por cuestiones de identidad de género.