Luis Canabal esperaba ser operado de una aneurisma en la arteria aorta tras ser diagnosticado el 10 de Mayo del 2012.

Su operación llegó a estar programada para enero de este año pero fue suspendida por otras urgencias de mayor riesgo.

El hombre falleció el pasado febrero, y la familia, junto a su abogado, preparan una reclamación patrimonial contra la Junta de Castilla y León.

La conserjería ha explicado en una nota de prensa que los pacientes en espera son valorados en función de su prioridad, y que el mismo mes que murió manifestó que se encontraba sin ningún síntoma preocupante.

Según esta nota, el paciente presentaba un trastorno de un riesgo menor que otros de carácter cardiólogo, y no presentaba hipertensión pulmonar ni ninguna enfermedad coronaria.

Sin embargo, la hermana del fallecido ha explicado que hubo errores desde que comenzó encontrarse mal ese día, ya que fue diagnosticado en el Hospital del Bierzo con una indigestión y lo mandaron a casa. Más tarde tuvo que volver a urgencias y tras cuatro horas de espera le derivaron a otro hospital, ya que en el que se encontraba no tenía servicio de cardiología.

Fue en el traslado en ambulancia cuando el hombre falleció.