En el juicio por el asesinato de Diana Quer ha salido a la luz el vídeo de la reconstrucción del crimen en la que se ve a 'El Chicle' recreando cómo presuntamente sucedieron los hechos.
Las primeras imágenes muestran al acusado en la zona con garrafas preparadas para robar gasoil de las furgonetas de los feriantes. Una agente de la Guardia Civil simula ser Diana Quer andando con el móvil.
En ese momento el acusado asegura que ve a la víctima y que no hay luz, a pesar de que hay dos farolas en el lugar. Allí, 'El Chicle' explica que le echa la mano a la garganta y que en "cuestión de segundos" se dio cuenta de que Diana estaba sin vida. Un extremo que, según los forenses que declararon, no es posible ya que se necesita más tiempo y una presión continuada para producir la muerte.
Uno de los guardias civiles que declaraba en ese momento ha explicado que golpeó de forma leve a una compañera (la que simulaba ser Diana) y 'El Chicle' contestó: "Yo no la golpeé tan fuerte".
Justo en el momento donde se escenifica cómo metió a la joven en los asientos traseros de su coche se ve a 'El Chicle' riéndose. Los agentes que han declarado durante el visionado de esas imágenes han explicado que el acusado aseguró que "Diana intentó empujarle", un elemento que se desconocía.
La reconstrucción continúa y se ve cómo el presunto asesino sale con el coche por la carretera pasando por el paseo del Arenal. Al llegar a la nave de Asados, entra por el portón y se dirige al sótano donde está situado el pozo. Allí escenifica "cómo retira la ropa": "No explica por qué el sujetador no aparece en el pozo y dice no recordar si quitó el tanga".
A continuación se observa en las imágenes cómo 'El Chicle' anuda los dos bloques para lastrar a Diana Quer y cómo los lleva al pozo. "Ahí se coloca el maniquí, introduce primero un ladrillo, luego el otro, sitúa el cable en el cuerpo de Diana", explican los agentes.
En ese momento, Juan Carlos Quer, el padre de la joven, no ha podido aguantar más y ha explotado encarándose al presunto asesino de su hija: "¡Podría haber sido tu hija!". Una reacción que ha provocado que el juez le expulsara de la sala.
En el juicio se han seguido mostrando la reconstrucción. El acusado ha apuntado que tras arrojar el cuerpo de Diana al pozo se dirigió al coche y al darse cuenta de que estaba el bolso, volvió para arrojarlo en el mismo sitio que el cadáver.