El vicepresidente de la Xunta y conselleiro de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia, Alfonso Rueda, ha abogado por "extremar" las medidas de precaución por parte de los conductores y del Ministerio de Fomento como responsable de la A-8 en aras de "la seguridad de todos".

La Autovía del Cantábrico (A-8), a su paso por el municipio lucense de Abadín, registró el pasado sábado debido a la densa niebla una colisión múltiple en la que murió una mujer y una treintena de personas resultaron heridas. Rueda ha sostenido esta mañana, en declaraciones a los periodistas, que este accidente en cadena en "condiciones meteorológicas casi extremas" es "motivo de preocupación" para el Gobierno gallego.

La A-8 continúa cortada en el municipio de Abadín, en el punto kilométrico 548,5, donde siguen trabajando varias grúas y efectivos del servicio de Conservación de Carreteras para retirar los 35 vehículos siniestrados.

De momento, según fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, no está claro cuándo podrá quedar abierta al tráfico la autovía, por lo que la circulación está siendo desviada por la carretera Nacional 634.