El joven detenido acusado de apuñalar a cinco personas en Lleida ha llegado cubriendo su cara y custodiado por los agentes.  Durante una hora y media ha estado declarando ante la magistrada, ha pedido perdón a las víctimas y ha vuelto a reconocer los hechos como ya hizo en el momento de su detención.

Las víctimas son cuatro extranjeros y un español, aunque el acusado ha asegurado que sus ataques fueron aleatorios, lo ha asegurado su abogado.

Pero en el atestado policial sí se ha incluido el agravante de xenofobia, además en su apartamento, al que prendió fuego antes de los ataques, los Mossos encontraron símbolos nazis en su vivienda.  La juez ha decretado para el acusado prisión provisional sin fianza.