La cámara de seguridad graba al asaltante de la casa de María Victoria Álvarez. El 30 de abril, poco antes de las 10 de la mañana, un hombre salta la valla y, por unos segundos, con el perro de la ex de Pujol Ferrusola al lado, inspecciona la zona. Decide entrar por la ventana, sin dificultades aparentes y sin ninguna prisa.
Victoria Álvarez está convencida de que, antes de entrar, alguien estaba vigilando. 18 minutos después el asaltante sale por la misma ventana y vuelve a saltar la valla, esta vez, hacia la calle. ¿Su botín? Materialmente escaso.
Álvarez asegura que no conoce al asaltante y tiene claro que buscaba información. Con este último episodio, Álvarez entiende que alguien está muy nervioso y quieren que ella también lo esté pero asegura, pese a todo, ella duerme muy tranquila.