El autoproclamado "candidato de los militantes" en las primarias del PSOE y exsecretario general Pedro Sánchez propone más poder y nuevos derechos para la militancia dentro del modelo de partido que dibuja en su proyecto, así como impulsar una "Alianza de Progreso" con otras fuerzas políticas.
Sánchez, que presenta esta tarde este proyecto en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, aboga en él por incluir en los estatutos del PSOE la obligatoriedad de consultar a la militancia los acuerdos de gobierno y el "derecho de iniciativa política de los militantes, para que puedan articular propuestas que sean discutidas en órganos superiores al local".
En la redacción del documento, que se titula "Por una nueva socialdemocracia" y consta de 32 páginas, han trabajado históricos del PSOE como el exministro y expresidente del Parlamento Europeo Josep Borrell, la economista y exministra Cristina Narbona, el sociólogo y director de la revista "Temas" José Felix Tezanos y el también economista y coordinador del Foro de Economía Progresista Manuel Escudero, han confirmado fuentes de su entorno.
Aseguran también que en él Sánchez ha volcado sus "ideas de un modelo de partido que no pudo llevar a cabo desde la Secretaría General". Dicho modelo pasa por "modernizar" las estructuras y procedimientos del partido, con la "participación y el empoderamiento de la militancia, la transparencia, la eficacia, la apertura a la sociedad española y las organizaciones progresistas y la rendición de cuentas como señas de identidad de una nueva época", según reza el texto.
En él Sánchez apuesta por "redefinir y cambiar las viejas metodologías de trabajo, abandonando el modelo de 'arriba-abajo' y dando espacio a enfoques y debates de 'abajo-arriba' desde la sociedad a los partidos". En esa línea lanza propuestas como que todos los cargos electos del PSOE rindan cuentas de modo "obligatorio, sancionable y periódico, como mínimo anualmente, de su gestión a los ciudadanos, mediante la apertura de procesos públicos y participativos".
También propone articular mecanismos de remoción de los órganos y cargos orgánicos para casos excepcionales de negligencia o pérdida de confianza; fijar un plazo máximo de 90 días para los mandatos de las gestoras y diseñar sistemas de elección directa para delegados por federaciones a congresos y conferencias políticas.
"La militancia debe ser considerada como la columna vertebral del partido y el ámbito donde se forjan los cuadros políticos del PSOE", subraya Sánchez. Otras de las medidas que plantea son que ningún militante pueda simultanear más de un cargo institucional de elección directa ni más de un cargo orgánico ejecutivo, y también ve incompatible simultanear un cargo orgánico provincial o de federación con un cargo federal.
En su "modelo de partido para el siglo XXI", en el que el exlíder del PSOE vuelca las novedades del proyecto que sustenta su candidatura, destaca también la defensa que hace de un "liderazgo integrador del pluralismo existente" en su organización y de la necesidad de "delimitar los papeles de liderazgo general con los de los representantes territoriales, que funcionarán en el ámbito de sus competencias, apoyándose mutuamente y no compitiendo entre sí".
Además pide que haya "criterios de introducción de representación de las minorías en los órganos ejecutivos", que una parte del Comité Federal sea elegida por la militancia, que se amplíe y definan mejor las competencias del Consejo Político Federal (órgano que preside Susana Díaz) y que se cree un consejo de alcaldes, alcaldesas y diputaciones a nivel federal.
El proyecto político de Sánchez, que está abierto al debate y a las aportaciones de la militancia, contiene otra parte de política económica que aboga por una "evolución hacia una Renta Básica Universal" y por valorar la viabilidad de un impuesto negativo sobre la renta.
Sobre la política de alianzas, dice que hay que potenciarlas con los sindicatos, especialmente con UGT y CCOO, y que "hay que desarrollar la unidad de acción de todas las fuerzas que coincidan en la necesidad de desarrollar una democracia avanzada en lo político y en lo económico que haga progresar la justicia social".
"El PSOE impulsará esta Alianza de Progreso", recoge un texto en el que Sánchez advierte de que para que los socialistas logren el apoyo de la mayoría social es "primordial que no proyecte la imagen de una organización que sufre divisiones internas, sino que aparezca ante la opinión publica como un partido unido y cohesionado".