El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado que las cuchillas colocadas en la valla fronteriza de Ceuta y Melilla "no son agresivas", sino "disuasorias" y ha añadido que las heridas que causan son de carácter "leve" y "superficial". Además, ha alertado de que las mafias están siguiendo con interés este debate y ha zanjado que España tiene la "obligación de controlar sus fronteras", que son las de la Unión Europea.
"Las vallas instaladas en Ceuta y Melilla tienen un efecto disuasorio para evitar que nadie entre en España y en la Unión Europea de forma ilegal. La concertina es una elemento pasivo de disuasión que no es agresivo, es un elemento pasivo", ha dicho el ministro --que en ningún momento ha usado el término 'cuchillas'-- tras ser preguntado por los medios de comunicación.
Fernández Díaz ha hecho estas declaraciones acompañado de su homólogo de Italia y vicepresidente del Gobierno de ese país, Angelino Alfano, durante una visita a las instalaciones con las que cuenta la Guardia Civil en Madrid, referencia a nivel europeo del control de fronteras y lucha contra la inmigración irregular. Alfano ha sido recibido antes en La Moncloa por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.
Ha defendido que España "está obligada a controlar sus fronteras porque somos la frontera de la UE" y ha reiterado que el objetivo es que "las mafias criminales no lo tengan fácil, que no puedan fácilmente de manera ilegal entrar en España y por tanto en Unión Europea".
El ministro ha asumido su responsabilidad y ha asegurado que "la experiencia" de su Departamento ante "este elemento de disuasión pasivo" en otras instalaciones como las penitenciarias demuestra que produce "erosiones leves, superficiales". "Lo digo para poner la cosas en su justa medida" ha añadido al tiempo que ha recordado que "ese mismo tipo de concertinas se usan en numerosos países de Europa".