El conseller de Empresa y Empleo, Felip Puig, ha asegurado que una hipotética independencia de Cataluña comportaría "ventajas" para las empresas, después de que el presidente de la farmacéutica Almirall, Jorge Gallardo, advirtiera el viernes a sus trabajadores de los riesgos de una posible secesión.

Puig ha explicado que entiende las "inquietudes" de este empresario, que difundió un vídeo entre sus empleados para alertar de las posibles consecuencias negativas que tendría la independencia de Cataluña, pero ha considerado que "no fue un mensaje equilibrado de pros y contras".

"Estoy seguro que en la cuenta de resultados de Almirall hay más deficiencias por pertenecer a la economía española que las que manifestó", ha señalado Puig, que ha subrayado que cualquier empresario puede dirigirse libremente a sus trabajadores y que no quiere generar "ninguna polémica" sobre este tema.

Sí que ha dicho, no obstante, que el mensaje de Gallardo se centró en los posibles inconvenientes de la apuesta por el soberanismo y que "echó en falta" que el empresario se refiriera a las "ventajas" que tendría la independencia para el tejido empresarial.

Ha comentado que los empresarios de Cataluña saben que la energía española es de las más caras de Europa, que su régimen fiscal es de los más disuasorios para la inversión y que los costes laborales son de los más altos de Europa.

Puig, por otro lado, ha explicado que el Gobierno ha presentado un nuevo recurso contra la Ley de comercio de Cataluña, poniéndose "del lado" de las grandes empresas y en contra del comercio familiar y de barrio. "El ataque al autogobierno se está manifestando por tierra, mar y aire y también el modelo comercial está siendo atacado", ha recalcado.