Menos de 24 horas para que comience la negociación real y Ciudadanos mantiene su advertencia: el PP no debe dar por hecho su apoyo hasta el final y siempre con condiciones: "Tiene que haber una reforma electoral y laboral, y también pedimos primarias al PP" ha dicho Carlos Carrizosa.

Las dos formaciones han estudiado este fin de semana los documentos intercambiados con propuestas y coincidencias. Fuera de esos papeles comparten una cosa: la presión sobre Pedro Sánchez para que el PSOE permita la investidura de Rajoy: "Sánchez tiene que hacer un sacrificio por los españoles" asegura Carrizosa.

En el PP se afanan en colocar toda la responsabilidad del bloqueo sobre los hombros de Sánchez: "El no de Pedro Sánchez es fruto de su inexperiencia y frivolidad. Habrá Gobierno cuando a los dirigentes socialistas les preocupe más España que su futuro personal" aseguró Alfonso Alonso.

A pesar de todo, dentro del Partido Socialista oídos sordos a las presiones. Desde Podemos, recuerdan a los socialistas que todavía hay alternativa posible frente a Rajoy. Mientras, en el PSOE, las diferencias internas sobre un plan B son evidentes. Iceta apuntaba que los socialistas no están entre la espada y la pared: entre Rajoy o elecciones: "Es un falso dilema entre que o gana Rajoy o terceras elecciones. Y no. Si no gana Rajoy habrá otras alternativas a explotar".

Y sólo unas horas después el socialista Antonio Miguel Carmona se preguntaba de qué alternativa habla Iceta. El tiempo corre en contra y siguen las mismas incógnitas: si Rajoy conseguirá la investidura y si de no ser así qué paso dará el PSOE.