Trump apenas podía reaccionar al conocer el varapalo a su nuevo veto migratorio. Un juez federal de Hawai lo ha suspendido temporalmente, horas antes de que entrara en vigor. Es el segundo revés legal a Trump, que ya vio como su primer veto quedó anulado a principios de febrero.

Pero no acaban ahí las malas noticias para Trump. El Senado, después de que ya lo hiciera el comité de inteligencia de la cámara de representantes, asegura que no hay indicios de que Obama interceptara las comunicaciones de Trump.