El centroderecha de Sarkozy gana la primera vuelta de las elecciones departamentales y frena a la ultraderecha. El expresidente francés ha dicho que este triunfo es el principio del cambio que necesita el país. El descalabro de los socialistas franceses por la baja popularidad de Hollande les deja como tercera fuerza política. Una oportunidad para Sarkozy de cara a las presidenciales de 2017.