Rusia ha declarado un alto el fuego en la asediada ciudad ucraniana de Mariúpol para evacuar a civiles a través de corredores humanitarios a partir de las 10:00 horas (hora local) de este jueves.
"Las Fuerzas Armadas de Rusia declaran -exclusivamente con fines humanitarios- un alto el fuego el 31 de marzo a partir de las 10:00 horas (hora local) de la mañana", ha afirmado el jefe del Centro de Control de la Defensa Nacional rusa, Mijail Mizintsev, tal y como ha recogido la agencia de noticias Interfax.
Las Fuerzas Armadas rusas han abierto un corredor humanitario adicional para la evacuación de civiles y extranjeros desde Mariúpol a Zaporiyia (con una parada en Berdyansk) a las 10:00 horas del 31 de marzo, ha indicado Mizintsev, según ha informado la agencia rusa de noticias TASS. El responsable militar también se ha prodigado en críticas contra los ucranianos, asegurando que las anteriores rupturas de las treguas humanitarias han sido rotas por los batallones nacionalistas, que han atacado a los convoyes civiles.
Por su parte, desde la presidencia ucraniana han señalado que las tropas rusas ya controlan la mitad del estratégico puerto del mar Negro, aunque la otra mitad resiste controlada por Kiev.
En la arrasada Mariúpol aguantan todavía 170.000 personas, aunque las reservas de agua y comida son cada vez más escasas. "Cocinamos lo que encontramos entre los vecinos. Un poco de col, un poco de patata. Hemos encontrado salsa de tomate y algo de remolacha", explicaba en declaraciones recogidas por Reuters Viktor, un antiguo trabajador del acero que vive en un sótano desde que comenzó la invasión. "Un oasis de paz", lo describe.
En Kiev, cuenta el periodista Alberto Sicilia, sí que se ha notado en los últimos días que el patrón de los ataques está cambiando, y se ha pasado del rugir de la artillería continuo a ataques que son más esporádicos pero también mas potentes.
Mientras, las fuerzas ucranianas se preparan para nuevos ataques rusos al este del país, donde se estarían acumulando las tropas rusas después de haber sido incapaces de tomar la capital. Formalmente, Rusia ha asegurado que va a reducir sus ataques en el marco de las negociaciones que está manteniendo con Ucrania -esta semana se han reunido en Turquía-, aunque desde Occidente se muestra escépticos.
De hecho, el Pentágono asegura que Rusia ya habría movido a casi el 20% de sus tropas en los alrededores de Kiev. La OTAN ha querido recalcar que no sería una retirada, sino un reagrupamiento para reforzarse.
Putin "se siente engañado"
Es más, la inteligencia estadounidense cree que los asesores más cercanos del presidente rusoVladímir Putin están engañándolo o no le dan información correcta al respecto del avance de la invasión. "Tenemos información de que Putin se ha sentido engañado por las Fuerzas Armadas rusas, lo que ha resultado en una tensión persistente entre Putin y su liderazgo militar", ha afirmado en las últimas horas la directora de Comunicación de la Casa Blanca, Kate Bedingfield, en una rueda de prensa.
La funcionaria explicó que la comunidad de inteligencia de EE.UU. ha revelado información que apunta a que Putin no sabía que sus militares habían estado sufriendo fuertes pérdidas en el campo de batalla. "Creemos que Putin está recibiendo información errónea de parte de sus asesores sobre el mal desempeño de las fuerzas militares rusas y cómo la economía rusa se está paralizando por las sanciones. Sus principales asesores tienen miedo de decirle la verdad", manifestó Bedingfield.
En otra rueda de prensa, el portavoz del Departamento de Defensa, John Kirby, ha aseverado que coincide con las conclusiones de las agencias de inteligencia, pero ha admitido que Estados Unidos "no tiene acceso a toda la información que se le ha dado (a Putin) ni a todas las conversaciones que ha tenido".
Kirby ha reconocido, además, que le produce "un poco de inquietud" que el líder de Rusia no sepa lo que están haciendo sus soldados en Ucrania. Ha expresado también temor a que esa situación afecte las conversaciones que se han estado produciendo entre Rusia y Ucrania para acercar posturas y lograr un alto el fuego. "Si (Putin) no está informado al completo, ¿cómo van a llegar sus negociadores a un acuerdo que sea duradero? Uno que desde luego respete la soberanía de Ucrania. Y otra cosa es que uno no sabe cómo va a reaccionar un líder cuando recibe malas noticias. Así que sí, es preocupante", ha añadido Kirby.
Las tropas rusas derriban un avión suyo
Por su parte, la inteligencia británica ha señalado que las tropas rusas están bajas de moral, se niegan a acatar órdenes e, incluso, han derribado por accidente una aeronave propia. Así lo ha asegurado el jefe del servicio de espías Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ, por sus siglas en inglés), Jeremy Fleming, que sostiene que el presidente ruso ha sobrevalorado las capacidades militares de su país y ha sobrestimado las de Ucrania y la resistencia de sus gentes.
En una intervención en la Universidad Nacional de Australia, en Canberra, Fleming ha asegurado que las tropas están bajas de moral y muy mal equipados. "Hemos visto a soldados rusos sin armas ni moral: negándose a aceptar órdenes, saboteando su propio equipo y accidentalmente derribando sus propias aeronaves", ha asegurado el espía.
Rendición de cuentas
Mientras, las potencias occidentales se preparan para que las autoridades rusas rindan cuentas por la invasión al país vecino. La subsecretaria del Departamento de Estado de Estados Unidos, Wendy Sherman, habló este miércoles por teléfono con sus homólogos de Francia, Alemania, Italia y Reino Unido, con quienes trató futuras medidas para que Rusia y Bielorrusia rindan cuentas por la guerra en Ucrania.
Sherman y los socios europeos también hablaron sobre la necesidad de que todos los países -incluida China- eviten proveer apoyo material a Rusia, y trataron la situación humanitaria en Ucrania, que se está deteriorando. Todos los participantes acordaron seguir coordinando esfuerzos para aislar a Rusia del escenario internacional dada "su flagrante violación de la ley y los principios internacionales".