Son muchos los interrogantes que aún quedan por despejar sobre los atentados de Boston después de la detención del supuesto coautor, Dzhokar Tsarnaev, que tiene una herida grave en la garganta que podría impedirle el hablar.
La policía investiga el móvil de los atentados de Boston
El alcalde de Boston, Tom Menino, ha apuntado, además, a la gravedad del estado de salud de Djokhar Tsarnaev. "Está muy grave y no sabemos si podremos interrogar a este individuo", ha afirmado Menino en declaraciones a la cadena de televisión ABC.
A pesar de su deteriodado estado de salud, tras lograr capturar vivo al joven de origen checheno, las autoridades esperan poder interrogarlo con la esperanza de que el sospechoso de ejecutar las explosiones, que dejaron tres muertos y 170 heridos, pueda contestar a las grandes incógnitas que aún quedan por resolver. La mayor de ellas, el por qué.
Y es que la inteligencia estadounidense, y las fuerzas de seguridad que participaron en el operativo, tanto a nivel federal y estatal, como local, aún no pueden asegurar con certeza si los hermanos Tsarnaev, Tamerlan y Dzhokar, actuaron solos, ni tampoco por qué decidieron colocar los artefactos explosivos en Boston.
El gobernador de Massachusetts, Deval Patrick, ha dicho en rueda de prensa que el sospechoso detenido se encuentra en "estado grave, pero estable, aunque aún no es capaz de comunicarse". "Esperamos que sobreviva porque tenemos millones de preguntas", aseguró Patrick, que espera que pronto se pueda iniciar la siguiente fase de este caso con los primeros interrogatorios a Dzhokar.
De hecho, con el objetivo de poder llegar hasta el fondo del asunto, el FBI y la CIA no leerán sus derechos básicos al joven, conocidos como "Miranda Rights", para que no pueda acogerse a permanecer en silencio cuando se realice el interrogatorio.
El sospechoso será interrogado por un "grupo de alto nivel" formado por miembros del FBI y la CIA que se encarga de los casos de terrorismo, quienes se remitirán a esta excepción de la justicia estadounidense en casos de peligro para la seguridad pública.
Dzhokar fue trasladado al hospital Beth Israel de Boston para ser tratado de las heridas que supuestamente sufrió en su huida en la noche del jueves y que le llevaron a ocultarse en un barco de recreo en el patio trasero de una casa en Watertown, al oeste de Boston. Tras casi una hora de negociación y varios intercambios de disparos con la imponente fuerza de grupos de elite de agencias federales, policía estatal, equipos SWAT de Boston y Guardia Nacional, Dzhokar se entregó malherido.
El jefe de Policía de la localidad de Watertown, Edward Deveau, dijo en una entrevista con la cadena CNN que, según los primeros indicios, los hermanos Tsarnaev actuaron sin ayuda, pero sigue siendo clave el interrogatorio al joven de 19 años.
Watertown, a las afueras de Boston, fue el escenario final de la persecución de ambos sospechosos después de que huyeran del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) la noche anterior tras acabar con la vida de un oficial de policía.
La investigación cree que los hermanos actuaron sin apoyo de grupos terroristas
Ambos emprendieron una huida que finalizó en ese municipio, donde los dos hermanos comenzaron un intercambio de disparos con la Policía, en un tiroteo en el que falleció el mayor de ellos, Tamerlan, y tras el cual Dzhokar se dio a la fuga. Según Deveau, en el lugar donde se mantuvo el primer choque entre las fuerzas de seguridad y los sospechosos, los agentes de seguridad encontraron pistolas, un rifle y al menos seis bombas, de las cuales creen que explotaron tres.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha convocado al Consejo de Seguridad Nacional del país, con el que estuvo reunido durante hora y media para tratar los últimos avances sobre la investigación, y subrayó la necesidad de continuar reuniendo información de inteligencia para poder responder a las preguntas que aún no han sido resueltas.
El menor de los hermanos podría enfrentarse a cargos federales por terrorismo y a otros cargos por homicidio a nivel estatal, según comentó a CNN un funcionario del Departamento de Justicia, aunque se prevé que también se le imputen cargos federales.