El opositor venezolano Leopoldo López, en arresto domiciliario en Caracas donde cumplía una pena de casi 13 años de prisión, ha sido liberado. El propio López lo ha confirmado en Twitter, aunque poco antes su padre había confirmado a EFE que se encontraba con el presidente encargado, Juan Guaidó, en una base militar del país.

Guaidó, reconocido como presidente interino por medio centenar de países, ha anunciado que "la familia militar de una vez dio el paso" para unirse a él y conseguir "el cese definitivo de la usurpación" que considera que Maduro hace del Gobierno.

Guaidó llama a un alzamiento militar

El Primero de Mayo, el cese definitivo de la usurpación empezó hoy", asegura en un vídeo publicado en Twitter y en el que se le puede ver junto a un grupo de militares en la base de La Carlota, en el este de Caracas. "A todos los que nos están escuchando: es el momento, el momento es ahora, no solo de la calma sino del coraje y la cordura para que llegue la calma a Venezuela, dios los bendiga, seguimos adelante. Vamos a recuperar la democracia y la libertad en Venezuela, sostiene Guaidó.

En dicho vídeo, llama a las calles a todos aquellos venezolanos que se han comprometido en las últimas semanas a manifestarse en las calles para exigir la salida de Maduro: "Contamos con el pueblo de Venezuela hoy, las Fuerzas Armadas están claramente del lado del pueblo, están del lado de la Constitución, leales al pueblo de Venezuela, a su familia, al futuro, al progreso".

Guaidó llama a la calle a los venezolanos: "Las Fuerzas Armadas están claramente del lado del pueblo".

"Hoy como presidente de Venezuela, como legítimo comandante en jefe de las Fuerzas Armadas convoco a todos los soldados a todos, a toda la familia militar, a acompañarnos en esta gesta como siempre hemos, hecho en el marco de la Constitución, en el marco de la lucha no violenta", asegura en el vídeo en que aparece acompañado por el líder opositor Leopoldo López. López, líder del partido Voluntad Popular (VP) del que también forma parte Guaidó,

Tras el fin de la transmisión uno de los militares que parece ser el comandante del grupo se dirige a los uniformados para darles instrucciones y tomar posiciones alrededor de la base, cuyo nombre oficial es Generalísimo Francisco de Miranda.

El ministro de Comunicación de Venezuela, Jorge Rodríguez, ha comunicado después que el Gobierno de Nicolás Maduro está "enfrentando y desactivando" un plan golpista."Informamos al pueblo de Venezuela que en estos momentos estamos enfrentando y desactivando a un reducido grupo de efectivos militares traidores que se posicionaron en el Distribuidor Altamira para promover un Golpe de Estado contra la Constitución y la paz de la República", indicó el ministro.

Ministro de Defensa: "Si hay que usar las armas, las usaremos"

Por su parte, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, ha asegurado que las Fuerzas Armadas rechazan "rotundamente" el "intento de golpe de Estado" atribuido a, Juan Guaidó, y ha advertido de que los militares están dispuestos a "usar las armas".

"Si hay que usar las armas (...), las usaremos", ha proclamado el ministro en un discurso televisado a la nación.

"Este acto anda buscando muertos, anda buscando derramamiento de sangre en la calles de Caracas. Todo el resto del país está en completa normalidad", ha declarado Padrino, que ha hecho a Guaidó y a sus apoyos "responsables" de toda violencia que pueda producirse, "de toda muerte que ocurra".

En este sentido, ha advertido de que "a Miraflores no se llega por la violencia".

Maduro asegura que están "enfrentando y desactivando" un plan golpista.

López fue liberado con un "indulto presidencial" de Juan Guaidó, según confirmó el padre de López en declaraciones telefónicas desde Boston (EEUU). "Hoy comienza la operación libertad en toda Venezuela" para "acabar con la usurpación" de Nicolás Maduro, subrayó el padre del opositor.

López se entregó a las autoridades venezolanas el 18 de febrero de 2014, después de que un tribunal de Caracas ordenara detenerlo por instigar a la violencia como uno de los convocantes de una manifestación que terminó con tres muertos y decenas de heridos seis días antes. Fue a una prisión militar acusado de los delitos de instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio. Acabó condenado en septiembre de 2015 a casi 14 años de prisión, que cumple actualmente en arresto domiciliario.