El llamado Nuevo Banco de Desarrollo, cuya sede se ubicará en la ciudad china de Shangai, contará con un capital inicial suscrito y desembolsado de 50.000 millones de dólares, de los que cada socio aportará una quinta parte, aunque ya se ha autorizado una ampliación hasta los 100.000 millones de dólares.
India ocupará la primera presidencia de turno de la entidad por ser el país que propuso la creación de este organismo y después será asumida por Brasil, Rusia, Sudáfrica y China, en ese orden.
El máximo responsable del consejo de Gobernadores será designado por Rusia, mientras que la cabeza del consejo de Directores será propuesta por Brasil. Ambos puestos serán rotativos.
"El banco representará una alternativa para las necesidades de financiación de los países en desarrollo" y "compensará las deficiencias de crédito" que existen actualmente en las instituciones financieras multinacionales, según dijo la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, durante la primera sesión plenaria de la Cumbre.
El Acuerdo de Reservas de Contingencia (CRA, por sus siglas en inglés) estará dotado con 100.000 millones de dólares y "ayudará a que los países eviten problemas de presión (por la falta) de liquidez a corto plazo".
A pesar de que en su declaración conjunta los BRICS criticaron al FMI y Banco Mundial, Rousseff afirmó que tanto el Nuevo Banco de Desarrollo como el Fondo de Reservas no "nacen en contra de nadie, sino a favor de nosotros mismos".
Los BRICS expresaron su "desacuerdo" y "seria preocupación" con el hecho de que el FMI no haya implementado las reformas acordadas en 2010 y pidió al Banco Mundial "estructuras de gobierno más democráticas" y un "fortalecimiento de la capacidad financiera" de la entidad.
"El proceso de reforma del FMI debe llevarlo a la modernización de su estructura de gobernanza de modo que refleje mejor el peso creciente de la economías emergentes en el desarrollo de la economía mundial", subraya la conocida como Declaración de Fortaleza.
El documento suscrito por los BRICS también repasó diversas cuestiones del escenario político internacional, aunque para ello empleó diversos tonos. Pasó de puntillas por el enfrentamiento entre Ucrania y Rusia (miembro del grupo), se opuso a la "continuada y expansiva construcción de asentamientos judíos en Territorios Palestinos Ocupados por el Gobierno israelí" y mostró su preocupación por los conflictos de guerra civil en algunos países de África, así como por el "aumento de la violencia" en Siria.
Tras la primera sesión plenaria de la Cumbre celebrada en Fortaleza, los líderes de las cinco economías emergentes se trasladaron a Brasilia, donde mañana se reunirán con varios presidentes latinoamericanos, a quienes, entre otros asuntos, les presentarán las oportunidades que ofrecerá el banco de desarrollo creado por el Foro.
En la declaración conjunta, los BRICS reconocieron la importancia de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) "en la promoción de la democracia y la paz en la región y en la consecución de desarrollo sostenible y erradicación de la pobreza".
"Renovamos nuestra disposición para el aumento del compromiso con otros países, en particular con aquellos en desarrollo y con economías emergentes de mercado, así como con organizaciones internacionales y regionales, todo ello con vistas a aumentar la cooperación y la solidaridad en sus relaciones con todas las naciones y los pueblos", señala el documento.
El presidente de China, Xi Jiping, indicó que los acuerdos de la VI Cumbre de los BRICS demostraron que el grupo, formalizado en 2009, "habla con una sola voz".