Sergio Ramos ha repasado toda su carrera profesional como futbolista, de principio a fin, en un acto promocional. El defensa español asegura que su actual club, el PSG, es el "equipo a batir" y que "hoy en día todos los jugadores quieren ir al PSG".

El camero ha dejado claro cuál es su objetivo desde su fichaje este mismo verano por el club parisino: "Fue ilusionante, emotivo, complicado también porque eran muchos años en el Madrid. Es un proyecto deportivo único, disfruté mucho con mi familia, con mi hermano en los primeros días. Necesitábamos un tiempo para adaptarnos, sobre todo por los colegios y encontrar una nueva casa. Y después soy optimista y me gustan los retos. Vengo a intentar ayudar al equipo para poder ganar otra Champions".

"Hoy es el equipo a batir por el proyecto, por todos los jugadores que hemos venido. Ahora hay que demostrarlo en el campo, estamos en una buena dinámica y aspiramos a ganar todos los títulos. Es un gran equipo, no tiene muchos años de historia, pero tiene un proyecto único y todos los jugadores quieren venir hoy al PSG. Sigo teniendo la misma ambición y quiero seguir ganando", añadió.

Además, reconoce que la acogida ha sido muy buena por parte de todos los integrantes de la plantilla y el cuerpo técnico: "Con Messi ya tenía contacto, con Keylor ya lo habíamos hablado antes. También con Neymar y más jugadores. El recibimiento ha sido extraordinario y así es más fácil la adaptación".

Ramos no ha querido dejar pasar por alto todos los buenos momentos que ha vivido a lo largo de sus 16 temporadas en el Real Madrid: "Inolvidables muchos, como el de Lisboa, con un gol mío en el último minuto cuando la esperanza estaba perdida. Todas las Champions, el primer partido, el primer gol, contra el Olympiakos, pero si me tuviera que quedar con uno sería con el gol de Lisboa que hizo llegar a la prórroga y a ganar la Champions".

"Es una jugada que habíamos ensayado anteriormente, tanto el equipo en los córners y con Modric. Teníamos muy buena relación, muy buen feeling, nos entendemos sin mirarnos, y sabíamos que a balón parado ellos desajustaban algunas veces y podíamos aprovecharlo aunque fueran un equipo fuerte y sólido. Hice un movimiento al segundo palo para engañar al contrario para ir al punto de penalti. Había muchos jugadores, hubo una especial de bloqueo y pude rematar solo. Será el gol de mi vida siempre", confesó.

Los primeros recuerdos del central "siempre son en un campo de fútbol en Camas". "Y después con la bandera de España me siento muy identificado, me considero muy patriota y orgulloso de representar siempre a mí país. Los caballos son una pasión desde niño y ahora puedo decir que soy un ganadero de la cría del caballo español", aseguró.

El exjugador del Real Madrid se ha mostrado muy orgulloso de sus padres: "Mi padre trabajaba y mi madre cuidaba de mis hermanos y de mí, de que tuviésemos una buena educación y mi padre estaba siempre trabajando y a veces en casa. Son mis orígenes, mis raíces y es algo que nadie debe olvidar".

Sus recuerdos en su pueblo natal de Sevilla, Camas, son "maravillosos". "Siempre recordaré mis primeros años porque la ilusión que tenía desde niño era jugar en el equipo de la ciudad", comentó.

Su paso por el Sevilla tuvo momentos inolvidables para Sergio Ramos: "Debuté en el campo del Dépor, con 17 años y está grabado en mi corazón. Y siempre estaré agradecido a Caparrós que me hizo debutar. Al final yo llegué con nueve años y estuve hasta los 19. Recuerdo los primeros años con Puerta o Navas, teníamos una relación increíble, única, y es una etapa maravillosa que siempre la recordaré de forma especial".

"En el Camas era delantero, extremo derecha, interior, a veces me metía en el centro del campo pero con los años faltaban jugadores atrás y me fueron metiendo en defensa. Pero siempre me gustó jugar arriba, estar en contacto con el gol. En Sevilla empecé en la banda derecha y siempre iba arriba. Era una etapa bonita la de lateral derecho", señaló el español.

Por último, ha hablado acerca de su largo paso por la Selección Española: "Me siento orgulloso, es algo irrepetible, ganar tres campeonatos consecutivos de esta importancia. Es un reflejo del trabajo y de una generación única. Ojalá lo posamos repetir pero cada vez es más complicado. Cuando ganas la Copa del Mundo llegas arriba del todo, ya no hay más, y la tengo en un lugar especial en casa".

"Mis mejores recuerdos son ganar estos trofeos, con distintos entrenadores. Para mí es un orgullo representar a mí país, defender mi escudo, con mi número, y poder ser capitán de la selección es una satisfacción personal muy grande y ojalá pueda seguir haciéndolo muchos años para jugar más partidos y poner el listón muy alto", concluyó.