Hace casi un año que se alcanzaba un acuerdo histórico en París. La Cumbre del Clima conseguía poner de acuerdo a 195 países para luchar contra el cambio climático. "Todos nos comprometimos a una senda baja ene emisiones de CO2, ahora hay que pasar a la acción, todos esos compromisos los tenemos que empezar a traducir en la implementación de ese acuerdo" asegura Valvanera Ulargui, Directora general 'Oficina Española del Cambio Climático'.

Un acuerdo que se firmó de forma oficial en abril en la ciudad de Nueva York y que ha entrado en vigor. "Ha sido el tratado más rápido de la historia en entrar en vigor en parte porque es una preocupación a nivel mundial" añade David Vieites, científico titular del CSIC.

El Tratado de París tiene como principal objetivo conseguir que la temperatura del planeta no suba dos grados al final del siglo. Para ello, hay que abandonar las energías sucias como el carbón y el petróleo y apostar por las renovables. Además, se crea un fondo anual de 100.000 millones de dólares para que los países en desarrollo crezcan sin contaminar.

"Hay que prestar atención a los mas vulnerables que ya están sufriendo los impactos del cambio climático, ahora tenemos el acuerdo y tenemos que ver como lo implementamos" comenta Tatiana Nuño, responsable de 'Greenpeace España'. Para definir esas actuaciones concretas que reduzcan las emisiones, comienza en Marrackech una nueva cumbre. El reto es conseguir que cada país reduzca sus emisiones todavía más de lo comprometido en París para que salgan las cuentas.

"Si tenemos en cuenta el global de emisiones que se han comprometido, llegaríamos a 4 grados centígrados en 2100", asegura Vieites. España es de los pocos países que aun no ha ratificado el acuerdo de París a nivel individual. "Con la formación del nuevo gobierno claramente tenemos que ver un cambio de rumbo en las políticas energéticas y climáticas" añade Nuño.

Las futuras generaciones comprobarán si hemos hecho los deberes a tiempo