Una vez más, los hooligans han vuelto a liarla en Binidorm. Cada partido de Inglaterra se convierte en un festival de alcohol y descontrol que termina con los vecinos como víctimas.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar, recoger datos estadísticos y mostrarle publicidad relevante. Si continúa navegando, está aceptando su uso. Puede obtener más información o cambiar la configuración en política de cookies.